El día de la boda es, por excelencia, el día de la novia. Los profesionales del maquillaje saben que una novia debe sentirse cómoda: es su día y su maquillaje debe responder a la perfección.
Para las novias más clásicas este tipo de maquillaje es el más aconsejado. Para revivir la tierna belleza de principios del siglo XX basta con saber combinar un rostro de porcelana con unos ojos despiertos y unos labios sensuales. El truco es un maquillaje sencillo y natural.
Rostro limpio sin imperfecciones
Para conseguir un rostro natural se ha empleado la base de maquillaje Colour Adapt. Ésta base aporta un suave acabado satinado, revelando los verdaderos tonos de la piel, todo ello sin comprometer la cobertura de las pequeñas imperfecciones. El color de las mejillas se consigue con un suave toque del colorete Blush On Satin de Max Factor en un tono rosado.
Ojos vivos y despiertosLa mirada de una novia nunca puede ser demasiado intensa. Lo mejor es aplicar una máscara que realce de manera natural los ojos, como Lash Lift de Max Factor, que eleva las pestañas y las separa del ojo, haciendo que la mirada resulte más viva y despierta. Prescinde de eyeliner o de kohl para no endurecer la mirada, mientras que los colores ideales de sombras de ojos Earth Spirits, empleados en este look, son los tierra en diferentes tonos, aplicado con delicadeza en el párpado móvil.
Labios de melocotónAnte todo naturalidad en este look. Los labios son frescos, sencillos, jugosos y con volumen gracias al efecto del perfilador Gold Lip Liner de Max Factor, empleado de manera muy sutil, y a la barra de labios Colour Perfection. Esta barra de labios, con su base exclusiva de gel, consigue que el color permanezca de manera uniforme durante más tiempo, evitando que el color desaparezca se consigue un color uniforme y duradero.
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